- Mié, 14 Dic 2005 23:38
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Yo procuro evitar los golpes en los rodamientos y los forcejeos en estos eventos. Y mucho menos a la hora de montarlos, ya que si damos golpes en la parte interior del rodamiento, fastidiaremos las pistas y las bolas.
Para sacar el trasero, preparo un taco de madera grande y lo cubro con un trapo grueso. Caliento el motor directamente sobre la vitrocerámica unos minutos. Lo voy cambiando de posición para que se caliente mas o menos por igual. Cuando considero que está suficientemente caliente, lo cojo con un guante de cuero y doy un golpe seco contra el taco de madera, de modo que el rodamiento suele caer solo. Si no sale a la primera, no insistas con los golpes; calientalo un poco mas y repite la operación.
Para meterlo, primero pongo el delantero, ya que es mas sencillo. Para ello caliento de nuevo el motor sobre la vitro y el rodamiento lo enfrío en el congelador. De este modo entra suavemente.
Una vez metido el delantero, caliento de nuevo el motor, el rodamiento trasero lo pongo en el cigüeñal, y meto ambos en el congelador. Cuando el motor está caliente, meto el cigüeñal con su correspondiente rodamiento y entra perfectamente, ya que al entrar el cigüeñal en el rodamiento delantero conseguimos que el rodamiento trasero entre perfectamente perpendicular en su alojamiento.
salu2
