Desconozco si lo de este niño es cierto o no, pero os cuento una anécdota de un chaval también de 4 años que se llama Lee y que juega al golf aquí en La Coruña. Es de origen coreano, y lo entrena su abuelo, que hace años fundó uno de los primeros gimnasios de artes marciales de esta ciudad. La gente que ha visto jugar a este niño en directo se queda embobada cuando le ven darle a la bola con esa fuerza, y cuando ven la perfección de su swing. Pero claro, cuando hablan con su abuelo, entonces se lo explican todo. Palabras del abuelo: "Pues sí, hoy por la mañana, Lee hará 800 golpes. Y después por la tarde, vendremos a hacer los 18 hoyos, y Lee ya sabe que si lo hace bien, tendrá golosinas de premio. Pero si sube un solo golpe sobre el par, entonces Lee ni cenará ni comerá al día siguiente". Así pues, yo no digo que este sistema tan rígido de entrenamiento (podéis llamarlo también esclavitud, si queréis), sea bueno o malo. Lo que quiero que entendáis es la diferencia cultural y filosófica. Nosotros, jamás haríamos esto con un hijo nuestro. Es más, en nuestra cultura y con nuestras costumbres, cualquier chaval de 4 años nos mandaría a tomar por el saco, y se iría a jugar a la pelota con sus amigos. Pero claro, son orientales... Es normal que este chaval ya haya ganado campeonatos en donde competían niños de hasta 12 años, y que por tal motivo haya sido recibido por el ministro de deportes de su país.
Y sobre lo de desanimarse y colgar el heli, ¡¡¡ni de coña!!! Lo voy a decir a lo bruto, y que perdonen los que se vean ofendidos, pero es que es la pura verdad: ¿Qué os pasa cuando veis una peli porno? ¿De qué os entran ganas? ¿De hacer el amor con vuestra pareja, o de tirar la toalla, porque jamás estaréis a la altura de ese musculoso y bien dotado actor? A mí me encanta ver videos de gente volando helis. Intento ver 4 o 5 al día, tanto de pilotos de renombre, como de gente desconocida. Y sean vuelos malos, regulares, buenos o excelentes, cada vez que termino de verlos, siempre me entran ganas de lo mismo: de coger el simulador, empezar a practicar, y, cuando termino, pongo a cargar la emisora toda la noche para intentar volar al día siguiente.
He empezado en este hobbie a los 37 años. Tengo claro que no voy a llegar a campeón de nada. Sin embargo, intentaré seguir volando hasta que pueda, porque es algo que realmente me apasiona, y os animo a todos a que hagáis lo mismo.
Y sobre las aficiones excesivamente prematuras, tengo un hijo de 5 años al que le dejo el simulador siempre que me lo pide. Es decir, ni se lo niego, ni se lo impongo. Ojalá que cuando llegue a mi edad la gente pueda hablar de lo bien que vuela, o de lo bien que hace cualquier otra cosa. Pero, por encima de todo, ojalá que él sea féliz y que todo el mundo sin excepción pueda decir que es una buena persona.
Por cierto, no consumo porno, fue sólo un ejemplo... Bueno, vale, es cierto: tengo un amigo, que tiene un primo, que tiene un vecino, que tiene una iguana, que dice que un día vio una peli de esas...
Saludos,