- Sab, 29 Nov 2008 14:31
#755271
Llevo tres años disfrutando de mi Lama, pero claro, al final uno se acaba aburriendo de todo y echaba en falta más nervio, más capacidad de respuesta y más mando... Me compré un CP2 y lo dejé por imposible, fracaso total, así que seguí probando con todos los upgrades disponibles -baterías, eje alargado, piezas metálicas, patín y cola "racing" etc, pero al final todos me han resultado inútiles, y lo único que tengo que no es de serie en mi Lama -aparte de la cola flexible- son las palas de Xtreme.
Pues bien, el otro día volando en exterior una bendita racha de viento me llevó al peque al suelo desde unos 10 metros; cayó en pasto mullido, y lo único que se rompió fue una de las palas inferiores. Como no tenía otro juego de palas irrompibles dejé arriba las de Xtreme y probé a ver si volaba poniendo abajo las negras, las de serie. ¡Vaya cambio! No puedo achacar el cambio a ninga otra cosa que no sea este cambio, ya que ninguna otra pieza resultó dañada. Desde entonces el heli es mucho más rápido de reacciones, hace las traslaciones a mucha mayor velocidad y desde luego es más nervioso. Espero poder colgar pronto un video para que veais las diabluras que hago ahora con él, "piruetas" impensables -sin olvidar que es un coaxial, claro- hasta antes del feliz aporrizaje.
En fín, ¡Una pasada!
Pues bien, el otro día volando en exterior una bendita racha de viento me llevó al peque al suelo desde unos 10 metros; cayó en pasto mullido, y lo único que se rompió fue una de las palas inferiores. Como no tenía otro juego de palas irrompibles dejé arriba las de Xtreme y probé a ver si volaba poniendo abajo las negras, las de serie. ¡Vaya cambio! No puedo achacar el cambio a ninga otra cosa que no sea este cambio, ya que ninguna otra pieza resultó dañada. Desde entonces el heli es mucho más rápido de reacciones, hace las traslaciones a mucha mayor velocidad y desde luego es más nervioso. Espero poder colgar pronto un video para que veais las diabluras que hago ahora con él, "piruetas" impensables -sin olvidar que es un coaxial, claro- hasta antes del feliz aporrizaje.
En fín, ¡Una pasada!
Sólo los peces muertos nadan a favor de la corriente